
por Marsel Esbey Toledo Aguilar
Merce Cu


Compartía con John Cage algunos de estos preceptos para la composición, en este caso, musical. Ambos utilizaban la abstracción del movimiento o el sonido como motivos para la creación y se valían del azar para determinar el desarrollo de la obra. En el caso de Cunningham, el azar era empleado para tomar ciertas decisiones como el número de bailarines participantes, la duración de uno u otro movimiento, el color del vestuario, etc. Sin embargo, al momento de montar una coreografía sí había precisión en las indicaciones a sus bailarines, las secuencias de movimiento son muy técnicas en cuanto a diseño.
El uso del azar no tiene que ver con que el resultado de la obra sea completamente inesperado o improvisado; existía una planeación y una responsabilida


Vimos un documental sobre la filmación de la coreografía puntos en el espacio en 1986. La coreografía requiere de modificaciones pues verla a través de una cámara o de una pantalla altera absolutamente la percepción del espectador, pues permite puntos de vista que el escenario convencional no permitiría. En este caso, el video es un elemento más que se añade a la obra y bien podría considerarse como un antecedente del video/danza. Resulta interesante que al ver ensayos de los bailarines en silencio el cuerpo adquiere cierta sonoridad, es posible imaginar sonidos con sólo mirarlos; claro, que los sonidos que Cage propone para la obra no van precisamente con el movimiento, no como en la tradición de la danza moderna. Es la unión de discursos en una sola obra.

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